Por fin , El Consejo de Ministros pone fin a la incertidumbre y autoriza al Imserso a la contratación de los servicios de organización, gestión y ejecución del programa de Turismo Social para personas mayores durante la temporada 2021/2022, con posibilidad de prórrogas.. Atendiendo las demandas de hoteles y agencias de viajes, el Ministerio de Derechos Sociales incrementará los importes mínimos para el cálculo de licitación.
El valor estimado del programa durante las tres temporadas, siempre y cuando se aprueben las dos prórrogas, asciende a 739,4 millones de euros (IVA excluido), de los cuales el Imserso asume el 23,8%. Para la presente temporada, que según el citado Ministerio arrancará en octubre, se convocan 816.029 plazas para 6.123 millones de estancias y se mantienen los precios fijados para las personas usuarias con el aumento medio de las pensiones (0,9%). No obstante, el número inicial de plazas podría aumentar dependiendo del resultado de la adjudicación.
Otra de las novedades es el incremento del número de plazas para turismo de naturaleza, capitales de provincia y circuitos culturales, pasando de 123.950 a 137.475. También se apuesta por las estancias de 10 días o menos, las más solicitadas en las últimas temporadas.
El Gobierno da este necesario paso varios meses después de lo previsto, una tardanza que pone en peligro el arranque de los viajes del Imserso en octubre. Expertos consultados por este digital explican que, una vez aprobados los pliegos, suele ser necesario un plazo de unos seis meses para armar el programa. Por lo tanto, opinan que los aproximadamente dos meses y medio que habrá en esta ocasión son claramente insuficientes.
Tras la publicación de los pliegos en el BOE, el siguiente paso será la convocatoria del concurso público, al que a priori concurrirán Mundiplan, Turismo Social, Logitravel y World2Meet (W2M). Las dos últimas intentarán poner fin al duopolio protagonizado por las dos primeras, las cuales llevan seis años repartiéndose los tres lotes del programa.
Una vez adjudicados los contratos, el Imserso deberá dar tiempo a las empresas que salgan victoriosas, todas ellas bajo mínimos por la crisis del Covid-19, a organizar su lanzamiento.
Y al ya de por sí exiguo plazo, existe el riesgo de que cualquiera de los aspirantes impugnen el resultado del concurso ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales. En anteriores ocasiones, por motivos de distinta índole, el programa sufrió importantes retrasos. La mayor demora se produjo en 2015, cuando los recursos presentados por Mundiplan y Turismo Social (entonces Mundosenior) provocaron que las ventas arrancasen un 11 de noviembre
