El archipiélago conocido como Corn Islands (‘Islas del Maíz’), en la Región Autónoma
de la Costa Caribe sur de Nicaragua, bien podría ser un paraíso para aquellos que
busquen la más absoluta tranquilidad y alejarse de las masas turísticas. Lo componen dos islas: la mayor, Big Corn Island, deunos 10 km2, donde se concentra el comercio y los transportes, y la pequeña, Little Corn Island, de tan sólo 2.9 km2, donde encontraremos reducidos y coloridos hostales, sin ruidos ni vehículos a motor.

¿Auténtico, por qué? Caballos que trotan apaciblemente por playas de arena blanca y fina, aguas cristalinas repleta de coral, pequeñas lanchas y cayucos tras una plaga de frondosos palmerales y diminutos embarcaderos, montañas de trampas para la pesca de langosta, un ron exquisito (marca nacional), platos caribeños a base de coco como el rondón… la lista de virtudes de esta tierra es interminable; una mezcla entre Jamaica, la costa africana y ápices europeos donde, además del español, se habla el inglés creole, y se baila a ritmo de reggae y calipso.