Ubicada en el sureste de Perú, Madre de Dios es una región que encarna la esencia de la Amazonía peruana. Conocida como la «capital de la biodiversidad», este destino ofrece una mezcla única de naturaleza, cultura y aventura, ideal para quienes buscan experiencias auténticas.
Desde sus imponentes áreas protegidas hasta su deliciosa gastronomía amazónica, esta región combina la aventura y la comodidad, con opciones de alojamientos ecológicos que permiten disfrutar de la selva con responsabilidad. Además, su fácil acceso hace de Madre de Dios una parada esencial en cualquier itinerario por Perú: a tan solo 40 minutos en vuelo desde Cusco o 1 hora y 45 minutos desde Lima. Asimismo, su riqueza cultural añade un valor especial a la experiencia.
Visitar Madre de Dios es sumergirse en uno de los lugares más emblemáticos de la Amazonía peruana, un lugar donde cada rincón cuenta una historia de vida y conservación. En 2025, la región espera recibir a viajeros de todo el mundo, invitándolos a descubrir su rica diversidad de flora y fauna, paisajes asombrosos, conocimientos ancestrales de las comunidades locales y su profundo compromiso con la sostenibilidad, reflejado principalmente en la Reserva Nacional de Tambopata, el Parque Nacional del Manu y el Parque Nacional Bahuaja Sonene.
Reserva Nacional de Tambopata: 25 años protegiendo la biodiversidad
Creada en el año 2000, la Reserva Nacional de Tambopata celebra en 2025 su 25º aniversario, consolidándose como uno de los destinos más importantes de Perú para el ecoturismo sostenible. Este santuario natural posee una impresionante biodiversidad, con más de 1.200 especies de mariposas, 600 especies de aves, y una gran variedad de mamíferos y reptiles, posicionándose como un paraíso para los amantes de la naturaleza y los observadores de fauna. La reserva ofrece un entorno único para el turismo responsable, destacándose como un ejemplo de conservación de la Amazonía.
Entre las experiencias más destacadas, la Reserva Nacional de Tambopata invita a explorar su vasto ecosistema a través de actividades como el canopy o paseo por las copas de los árboles, proporcionando una perspectiva única de la Amazonía peruana. Otro importante atractivo es el Lago Sandoval, un espejo de agua rodeado de vegetación densa, que alberga caimanes, aves exóticas y una rica biodiversidad acuática.
Para aquellos que buscan una experiencia más inmersiva, la oferta de lodges ecológicos en la región ofrece un alojamiento cómodo y respetuoso con el medio ambiente. Estos lodges, situados en medio de la Amazonía peruana, proporcionan una experiencia cercana a la naturaleza, sin sacrificar el confort. Los alojamientos están diseñados con un enfoque en la conservación y el ecoturismo responsable, respetando la biodiversidad local y contribuyendo al desarrollo sostenible de la región.
La Reserva Nacional de Tambopata también ofrece actividades que permiten una inmersión única en la naturaleza y la cultura local. Entre ellas resaltan el tiro con arco y flecha, la navegación por los ríos y la visita a la collpa de mamíferos, un lugar donde se pueden observar diversas especies en su hábitat natural.
Asimismo, la comunidad nativa Ese Eja ofrece enriquecedoras experiencias de turismo comunitario, combinando la aventura con el aprendizaje cultural. Se pueden realizar caminatas de exploración diurnas y nocturnas guiadas por expertos locales, observación de guacamayos y caimanes, visitas al huerto etnobotánico de plantas medicinales de la comunidad y degustaciones de frutas orgánicas, una experiencia sensorial que resalta los sabores de la región. Estas propuestas proporcionan un acercamiento genuino a la cultura local, promoviendo el respeto mutuo y el apoyo a la economía de las comunidades de la zona.