Tras Fitur, llegó al mercado Iberik Hoteles, una nueva empresa hotelera con capital 100% español. La nueva cadena aprovecha también el auge del sector, después de uno de los años más difíciles en su historia.
Iberik inicia su andadura empresarial con un ambicioso plan de crecimiento, con cuatro establecimientos en menos de dos meses. En ese periodo tiene previsto posicionarse con 317 habitaciones y una plantilla de 115 profesionales, a cuyo frente se encuentra Antonio Mediavilla, directivo con amplia experiencia en gestión hotelera y que apuesta firmemente por el proyecto.
El primero de sus hoteles abrió sus puertas en el centro de Oviedo. Iberik Santo Domingo Plaza, un cuatro estrellas con 101 habitaciones y con muy buena acogida en sus primeras semanas. A finales de mayo la empresa pondrá en marcha Iberik Triacastela, en Lugo. Este con 16 habitaciones para albergar a los peregrinos del Camino de Santiago, construido en los cimientos de una antigua casa señorial.
Después llegará la apertura de Iberik Augas Santas Balneario & Golf en la localidad lucense de Pantón. Este será el buque insignia de la cadena con 118 habitaciones, donde los clientes podrán disfrutar del club termal con servicios de belleza, un extraordinario campo de golf con 18 hoyos, gimnasio y restaurante.
En julio finalizarán la primera fase de aperturas con la puesta en marcha de Iberik Rocallaura Balneari, en la provincia de Lérida. Unas modernas instalaciones con 82 habitaciones en la Ruta del Císter, con balneario de aguas mineromedicinales construido sobre una antigua masía.
La cadena nació bajo la filosofía de Hoteles con Alma, para disfrutar con los cinco sentidos, diseñados como alternativa para aquellos turistas que buscan una manera diferente de viajar.
Sus responsables apuestan por un concepto diferente, un modelo hotelero al alcance del gran público en el cual se han cuidado al máximo todos los detalles. Cada establecimiento cuenta con personalidad propia para que el cliente supere sus expectativas.
