Con el aumento de contagios en el estado mexicano Quintana Roo, el gobernador Carlos Joaquín González dio a conocer las nuevas medidas para tratar de controlar la tercera ola que vive la zona.
Dentro de ellas, los hoteles pedirán certificado de vacuna o prueba PCR negativa para permitir el acceso.
Esta medida se implementó a partir del 26 de julio y se aplicará para sitios cerrado como plazas, bares, centros nocturnos, restaurantes y por supuesto hoteles. Serán sancionados aquellos negocios que no cumplan con la restricción. “Sobre aviso no hay engaño”, dijo el gobernador González.
Adicionalmente, el personal de los establecimientos debe estar vacunado o deberán presentar cada tres días una prueba negativa de PCR o antígeno. Los restaurantes podrán estar abiertos hasta las 12 de la noche, con un aforo máximo del 50%, de acuerdo al semáforo epidemiológico naranja.
La tercera ola de Covid-19 alimentada por la variante Delta altamente contagiosa está golpeando dos de los destinos turísticos más populares de México en costas opuestas como son Los Cabos en el Pacífico y Cancún en el Caribe.
En el último, los casos se han disparado hasta el punto en que el hotel Hard Rock ha reservado dos pisos para huéspedes con síntomas. Además, algunos hoteles dicen que ofrecen descuentos para quienes están en cuarentena hasta que ya no sean contagiosos.