Correos, cuya entrada en el negocio de la distribución turística provocó un terremoto en el sector de agencias, atraviesa uno de los momentos más complicados de su larga historia. Muchos desde sindicatos, trabajadores,etc,etc, aseguran que la compañía está al borde de la quiebra.
Según ABC, la mayor empresa pública de España, que da empleo a la nada desdeñable cifra de 52.000 personas, tuvo que pedir un crédito de 433 millones de euros para poder abonar las nóminas de sus empleados. Y no solo eso. Cerró 2020 con unas pérdidas de 256 millones y prevé otro balance negativo de 91 millones en 2021, ejercicio cuyas cuentas aún no se han hecho públicas.
La situación en este 2022 tampoco invita al optimismo. Las fuentes consultadas por el mencionado medio alertan del previsible impacto que tendrá la subida de precios aplicada por Correos, por encima de la inflación (algunas entre un 10% y un 20%). Además, ha perdido clientes de la talla del chino AliExpress, que le aportaba más de 5,5 millones de envíos anuales.
