Hasta el 31 de agosto, la isla se enorgullecerá de albergar por tercera vez Carifesta, el principal festival de arte y cultura del Caribe. Bajo el lema «Raíces caribeñas, excelencia global», el evento reunirá lo mejor de la música, la danza, el cine, la literatura, las artes visuales y la creatividad culinaria.
Durante diez días, Barbados se transformará en un enorme escenario cultural con espectáculos espectaculares, desfiles de moda, exposiciones, simposios, un gran mercado y una villa creativa dedicada a los jóvenes, todo ello con un enfoque en la sostenibilidad y la innovación.
Barbados no es solo un destino turístico; es un vibrante epicentro cultural en el corazón del Caribe. Ubicada en la región sureste, la isla presume de una rica mezcla de influencias africanas, británicas y caribeñas, reflejada en su arquitectura, gastronomía, música y estilo de vida. Desde festivales de fama mundial hasta tradiciones íntimas, Barbados ofrece experiencias inmersivas durante todo el año.
También celebrará el movimiento nacional «We Gatherin'», que invita a los bajanenses, tanto locales como internacionales, a reencontrarse con sus raíces. Cada municipio organiza celebraciones únicas que resaltan el patrimonio, la música, la gastronomía y las costumbres locales. Viajeros de todo el mundo están invitados a participar en esta experiencia cultural que refuerza el sentido de comunidad e identidad de la isla.
Otro hito importante es el festival Crop Over, que se celebra entre julio y principios de agosto. Originalmente asociado con el final de la zafra de caña de azúcar, hoy es una explosión de creatividad de tres meses que fusiona los sonidos del calipso y la soca, géneros que representan tanto la crítica social como la energía contagiosa del Caribe. El programa incluye concursos tradicionales, desfiles, ferias callejeras, fiestas exclusivas y experiencias privadas, que culminan con el Gran Día del Kadooment, la celebración más emblemática, cuando miles de personas disfrazadas toman las calles de Bridgetown en un espectáculo de música, baile y color.
La música es uno de los sellos más profundos de la identidad barbadense. A lo largo del año, la isla vibra con los sonidos de la soca, el calipso, el jazz, el reggae, el dancehall, el spouge y las tradicionales tuk-bands, que combinan instrumentos de estilo militar con ritmos africanos, acompañados por la danza Landship y personajes folclóricos como Mother Sally y Shaggy Bear. En la década de 1960, Jackie Opel creó el spouge, una fusión de calipso y reggae temprano que se ha convertido en un preciado legado.
El Festival de Reggae de Barbados, que se celebra entre abril y mayo, refuerza la vitalidad de la escena musical contemporánea. Barbados también es el hogar de estrellas mundiales como Rihanna, un ícono cultural que mantiene su conexión con la isla, y Rupee, quien difundió la soca barbadense al mundo con éxitos como «Tempted to Touch» y «Jump».
Además de sus principales festivales, la isla acoge celebraciones tradicionales que enriquecen su calendario anual, como el Festival de Holetown en febrero, que conmemora el primer asentamiento inglés, y el Festival del Pescado de Oistins en Pascua, que rinde homenaje a la herencia pesquera de la isla con ferias, concursos y música en vivo.
Barbados es más accesible que nunca para los viajeros latinoamericanos gracias a las conexiones directas de Copa Airlines vía Ciudad de Panamá y los viajes sin visa, además de los vuelos diarios vía Miami. Esta creciente conectividad facilita el acceso a los visitantes que desean participar en festivales, experimentar el rico patrimonio cultural de la isla y disfrutar de su cálida hospitalidad.
Con su diversa gama de celebraciones, tradiciones y experiencias musicales, Barbados reafirma su posición como el corazón cultural del Caribe, un destino donde cada viaje se convierte en una inmersión inolvidable en la cultura, la creatividad y el alma vibrante de la región.
Tomado del perfil de Facebook del profesor José Luis Perello
