La Costa del Sol tiene hoy todos sus ojos puestos en el aeropuerto, la estación de trenes María Zambrano y las carreteras. Y es que la provincia de Málaga afronta su primera prueba de fuego con el inicio de la temporada turística por excelencia.
Lo que suceda desde este 1 de julio hasta el próximo domingo servirá para tomar el pulso a un verano que es recibido con optimismo desde el sector y en el que los hoteleros tienen puestas todas sus esperanzas. No se esperan las oleadas de visitantes habituales antes de la pandemia, pero sí una notable mejoría respecto al año pasado, algo que permita, ahora sí, hablar con seguridad de una reactivación del turismo.
Al aeorpuerto de Málaga-Costa del Sol está prevista la llegada de 728 vuelos, tanto nacionales como internacionales, desde hoy hasta el domingo, según los datos consultados en la página web de Aena. Los dos días del fin de semana serán los de mayor movimiento. En cuanto a los despegues, se esperan 257 en total en esas mismas fechas. Desde el aeródromo subrayaron ayer en un comunicado que se aprecia una mejoría en el comportamiento de la demanda y en la oferta que las compañías aéreas están poniendo en el mercado. Todo ello con la finalización del estado de alarma y la evolución de la situación epidemiológica, con el avance de la vacunación, precisaron.
Para atender la recuperación de la actividad. Con la puesta en servicio de ambas áreas, la infraestructura vuelve a estar al 100% de su capacidad para acompañar a la recuperación del tráfico aéreo. La ampliación de instalaciones operativas tiene como finalidad “ir adaptándose a la demanda y permitir una mayor capacidad, persiguiendo en todo momento la calidad del servicio”.
Málaga encabeza la demanda del bono turístico
El vicepresidente de la Junta de Andalucía y consejero de Turismo, Juan Marín, explicó ayer que la demanda del bono turístico en la comunidad ha crecido al pasar de 70 bonos semanales a 800, por lo que estimó que se trata de “un ritmo muy bueno”, y expresó su confianza de que su impacto se haga notar en el otoño para contrarrestar la estacionalidad. Málaga es la provincia andaluza con mayor demanda, 117 solicitudes, y consecuentemente la de mayor gasto, 14.707,48 euros, lo que supone que representa un tercio del gasto total y de las solicitudes financiadas.
El nuevo escenario, similar al anterior a la pandemia, añade a la T3 y los muelles C y D, el área de facturación de la T2, los filtros de seguridad de dicha terminal y el muelle B, que se ha sometido a una profunda modernización durante los meses en los que ha estado cerrado al tráfico. La reapertura total forma parte del proceso general de reorganización en la red de aeropuertos de Aena y es la cuarta que lleva a cabo la infraestructura malagueña para adaptarse a la pandemia.
Por su parte, Renfe ha programado desde este jueves al domingo refuerzos en el AVE Madrid-Málaga. En concreto serán siete los trenes que circulen en doble composición, es decir, con el doble de sus plazas habituales. Con este refuerzo se añaden 2.300 plazas a la oferta regular, tal y como afirmaron fuentes de Renfe.
En cifras globales, Renfe pondrá en circulación 80 trenes AVE con origen o destino Málaga del 1 al 4 de julio, con los que ofrecerá más de 27.000 plazas para viajar a la Costa del Sol. En esta oferta están incluidos tanto los AVE Madrid-Málaga como los Barcelona-Málaga. Ambas relaciones permiten conectar la capital malagueña de manera directa con ciudades como Barcelona, Madrid, Ciudad Real, Córdoba, Zaragoza, Tarragona o Lleida entre otras.
En el sector turístico de la Costa del Sol confían en tener un buen verano, en comparación con el de 2020. Esperan un buen comportamiento del mercado nacional y cruzan los dedos para recuperar lo antes posible a su principal emisor internacional, el turista británico –una vez que el Gobierno de Reino Unido incluya a España en su lista verde de viajes.
