Quito, la joya colonial de los Andes, se convierte cada año en el escenario de una de las celebraciones más espectaculares de la Semana Santa en América Latina. Entre rituales centenarios, procesiones multitudinarias y expresiones de fervor religioso, la capital ecuatoriana ofrece una experiencia inolvidable para quienes buscan sumergirse en una tradición viva que ha perdurado por siglos.
La ciudad, en colaboración con la Iglesia Católica y con el respaldo del Municipio de Quito, organiza y apoya diversas actividades con el propósito de potenciar el turismo religioso y generar beneficios para el sector productivo y económico. En 2024, de Semana Santa atrajo a 84 mil visitantes no residentes y dinamizó la economía con 7.6 millones de dólares en ventas, cifras que se espera igualar o superar en este año.
Concretamente, el corazón de la celebración se encuentra en su Centro Histórico, el mejor conservado de Sudamérica, donde imponentes iglesias y plazas patrimoniales sirven de marco para eventos de gran simbolismo. Destaca la Procesión de Jesús del Gran Poder, que cada Viernes Santo reúne a miles de fieles en un acto de devoción sin igual.
Por su parte, el Arrastre de Caudas, una ceremonia única en el mundo de origen romano que solo se mantiene en Quito, es uno de los mayores reclamos en la que un manto negro es extendido sobre los asistentes como símbolo de protección y renovación espiritual.
Más allá del casco histórico, las parroquias rurales de Quito conservan expresiones religiosas propias que enriquecen la festividad. Procesiones como la de las Andas en Puéllaro o la de los Diablos en La Merced reflejan el sincretismo cultural que caracteriza la Semana Santa quiteña.
Entre historia, devoción y gastronomía, Quito se reafirma como un destino imprescindible para vivir una Semana Santa única, donde la espiritualidad y la cultura se entrelazan en un entorno de belleza inigualable.
El sabor de la Semana Santa en Quito
La Semana Santa en Quito no solo es una manifestación de fe, sino también una oportunidad para degustar la fanesca, el plato más representativo de la temporada. Esta espesa sopa, preparada con una base de granos andinos, zapallo, leche y bacalao, encarna la fusión de tradiciones indígenas y católicas. Su preparación es un ritual en sí mismo, que une a familias y comunidades en torno a los fogones.
Cada ingrediente tiene un significado especial: los granos simbolizan la abundancia y los doce ingredientes principales evocan a los apóstoles de Cristo. Durante estas fechas, restaurantes y mercados de la ciudad ofrecen su mejor versión de este manjar, y el concurso «Fanesca Quiteña: Tradición que Une» premia a los establecimientos que conservan su autenticidad y sabor tradicional.
La Semana Santa en Quito es una oportunidad única para vivir la fe, el arte y la historia en una ciudad que mantiene viva la tradición. Para conocer el cronograma completo de la Semana Santa en Quito, ingresa en las páginas oficiales de Visit Quito, Quito Cultura y Teatro Sucre.
¡Con turismo, Quito renace!